Hoy, 23 de septiembre, es el Día de la Visibilidad Bisexual. Esta fecha fue creada con el objetivo de visibilizar (valga la redundancia) a la bisexualidad como una orientación sexual válida dentro de la comunidad LGBTIQ+ y posicionar la urgencia de atender las problemáticas que afectan a las personas bisexuales.

Como mujer bi y activista por los derechos humanos, considero que esta fecha es sumamente importante porque, al ser una de las orientaciones sexuales más invisibilizadas, debemos  ser escuchades  y alzar la voz.

¿Qué significa ser bisexual?

No existe una definición absoluta de la bisexualidad, lo cual puede confundir a algunas personas. En sus inicios, la bisexualidad era definida como la atracción hacia hombres y mujeres, pero a lo largo de la historia, esta definición cambió. Actualmente, la bisexualidad es definida como la “atracción hacia personas de tu mismo género u otros” o “la atracción hacia más de un género”. Un ejemplo del uso de una definición más inclusiva a la diversidad de género es el Manifiesto Bisexual, publicado en 1990 por  The Bay Area Bisexual Network (San Francisco, EEUU).

“La bisexualidad es una identidad completa y fluida. No asumas que la bisexualidad es binaria, o duógama por naturaleza: que tenemos “dos” lados o que tenemos que estar simultáneamente con dos géneros para ser seres humanos plenos. De hecho, no asumas que solamente existen dos géneros. No confundas nuestra fluidez con confusión, irresponsabilidad o incapacidad para comprometernos [a una relación monógama] No equipare la promiscuidad, la infidelidad o el comportamiento sexual inseguro con la bisexualidad.”

La activista bisexual estadounidense, Robyn Ochs, creó una definición de la bisexualidad que engloba la diversidad de experiencias de personas bisexuales.

“La bisexualidad es la capacidad de sentir atracción romántica, afectiva y/o sexual por personas de más de un género/sexo

…no necesariamente al mismo tiempo

…no necesariamente de la misma manera

…no necesariamente en el mismo grado ni con la misma intensidad.”

¿Cuál es la problemática bisexual?

La experiencia de las personas bisexuales no es idéntica a la de personas gays y lesbianas debido a la bifobia. La bifobia es la discriminación hacia personas bisexuales que nace del monosexismo, es decir, la estructura social que presupone que todas las personas nos sentimos atraídas solamente por un género (Red Iberoamericana de Educación LGBTI).

A pesar de ser mayoría en la comunidad LGBITQ+, las personas bisexuales suelen ser menos representadas en los medios de comunicación (The Williams Institute y GLAAD). Además, se ha identificado niveles más altos de violencia hacia esta población, lo cual ocurre también en espacios laborales. Por ejemplo, en un estudio realizado por Trade Unión Congress, se identificó que 1 de cada 5 mujeres y hombres bisexuales experimentó algún tipo de acoso sexual en el trabajo (22% y 20% respectivamente).

Algunas de las problemáticas principales para las personas bisexuales en espacios laborales son:

• Mantenerse en el clóset por miedo a discriminación bifóbica y falta de representación en cargos altos (HRC)
• Sesgos específicos a las personas bisexuales que las catalogan como indecisas, no confiables y disruptores (Stonewall UK)
• La normalización de comentarios y chistes bifóbicos. Debido a que la experiencia de personas gays y lesbianas ha sido más visible, se suelen normalizar aún más ciertos chistes o comentarios bifóbicos. Por ejemplo, asociar la bisexualidad con promiscuidad, sugerir prácticas sexuales, entre otros comentarios, suelen ser bastante comunes pero a la vez súmamente dañinos para un espacio laboral seguro y cómodo.
• Falta de sentido de pertenencia dentro de espacios diseñados para la comunidad debido a la invisibilización de la B en LGBTIQ+.

5 recomendaciones para la inclusión laboral bisexual

1. Representación y visibilidad explícita de la bisexualidad en los grupos de afinidad /  ERG / comité de diversidad.
2. Agregar a la agenda de celebraciones LGBTIQ+ el día de la visibilidad bisexual (23 de septiembre).
3. Incluir la bisexualidad y la bifobia en las capacitaciones o acciones de prevención de discriminación.
4. Mencionar a las personas bisexuales en las políticas relacionadas a la comunidad LGBTIQ+. Además, tener en cuenta la hipersexualización de las personas bisexuales en las políticas de hostigamiento.
5. Monitorear las diferencias entre las experiencias de las personas bisexuales y sus pares gays y lesbianas. Promueve sistemas de informes confidenciales para asegurarse de recopilar datos confiables sobre la representación de personas bisexuales en toda la organización.

Si bien las experiencias de personas bisexuales son parecidas a sus pares gays y lesbianas, es importante recordar que tienen problemáticas diferenciadas. Para poder tener un espacio laboral realmente inclusivo, todas las letras del acrónimo deben sentirse bienvenidas.

Pamela Vallejos Chavez (ella)

Directora de comunicaciones de Presente ONG. Comunicadora social y especialista en género y diversidad LGBTIQ+. Fundadora del blog Soy Bisexual. Bachiller en Humanidades de University of British Columbia.