Creemos que las prácticas empresariales con enfoque de derechos humanos son un aporte muy importante al desarrollo de nuestro país. Sin embargo, es necesario identificar cuando estas prácticas son genuinas y forman parte del valor de la empresa, pues es efectivamente en situaciones de crisis donde vemos si este compromiso va más allá de un discurso, de conseguir premios y certificados.

Lamentablemente, la respuesta de la empresa Repsol ante la catástrofe medioambiental fue insuficiente, inoportuna y contraria a las recomendaciones e indicadores del Plan Nacional de Empresas y Derechos Humanos 2021-2025, elaborado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. La sostenibilidad no debe ser solamente un discurso destinado a generar reputación positiva para la empresa. Debe ser un principio que nos lleve a analizar de manera transversal cómo nuestras actividades impactan en nuestro entorno, asumir responsablemente nuestros errores e identificar formas oportunas de reparación.

Esperamos que Repsol se haga cargo de los daños generados a la biodiversidad, al ambiente, a las personas afectadas; y que colabore con el Estado en la investigación iniciada.

Es momento de que nuestro país empiece a sanar tanto en lo social como en lo ambiental.

Presente ONG

Somos una organización que trabaja por el acceso a los derechos de las personas LGBTIQ+, a través de la generación de alianzas estratégicas y la co-construcción de proyectos para nuestra comunidad.