Hace unos años, cuando recién empezaba a aceptar mi orientación sexual, escuché de una persona muy cercana que no creía en la bisexualidad. Ese día, como muchos otros, me quedé callada. Por eso hoy, en el día de la visibilidad bisexual, les comparto mi experiencia.
Para quienes no me conocen, mi nombre es Pía y soy una mujer bisexual de 24 años. Soy psicóloga y actualmente la directora ejecutiva de Presente, una ONG que se dedica a crear espacios seguros para la comunidad LGBTIQ+ en Perú.
Sin embargo, ser una mujer bisexual visible y liderar una organización LGBTIQ+ no es fácil. Es enfrentarme constantemente a sesgos y muchas veces a preguntas incómodas que demuestran este doble prejuicio al que nos tenemos que enfrentar muchas mujeres de la diversidad. Según McKinsey, en comparación con las mujeres y hombres heterosexuales, las mujeres bisexuales tenemos 13 y 28 puntos porcentuales, respectivamente, más probabilidades de haber experimentado microagresiones.
Es común escuchar que las personas bisexuales ‘la tenemos más fácil’ porque ‘pasamos’ como heterosexuales la mitad del tiempo. De todos los muchos mitos a los que la bisexualidad se enfrenta, este es uno de los más dañinos.
Según la Asociación Estadounidense de Psicología, las personas bisexuales somos más propensas a estar en el clóset, ser víctimas de violencia sexual y tener problemas de salud mental (como depresión y ansiedad) que nuestros pares gays y lesbianas. Lamentablemente, para nosotres la experiencia de “no pertenecer” no termina cuando salimos del clóset, sino incluso dentro de la propia comunidad muchas veces no somos bienvenides de la misma manera por no ser lo suficientemente queer.
Ser una mujer bisexual visible y liderar una organización LGBTIQ+ no es fácil.
Para mí, ser bisexual se trata de vivir genuinamente segura de quien soy, sin importar quién lo entienda o no. Para algunas personas es más “fácil” entender que eres gay o lesbiana, pero mi orgullo bisexual nace del no tener que ajustarme a un modelo que sea mas entendible, sino de resistir y ser feliz desde lo incomprendido.
Las personas bisexuales no estamos confundidas. Nuestra experiencia no es igual a la de una persona lesbiana o gay.
Cuando recién estaba descubriendo quién era, me hubiese encantado tener más referencias de la bisexualidad que solamente personajes de películas o series de televisión.
Hace tiempo que ya es momento de cuestionar no solamente cuántas mujeres hay en posiciones de liderazgo en el Perú, sino también a cuántas mujeres diversas podemos encontrar. En mi caso, lamentablemente no he podido conocer a muchas.
Las grandes cifras de hostigamiento, discriminación y acoso son barreras que nos imposibilitan el acceso a las mismas oportunidades de desarrollo. Sin embargo, la falta de referentes visibles se hace cada vez más evidente, y cada vez más urgente.
La importancia que se le da a la diversidad LGBTIQ+ en espacios laborales en nuestro país ha ido en aumento. Cuando recién empezó Presente, nos alegrábamos cuando una o dos empresas nos abrían sus puertas para implementar programas de diversidad LGBTIQ+. Hoy estamos trabajando por mejorar los espacios laborales de personas LGBTIQ+ en más de 50 empresas, y el número crece cada vez más.
La falta de referentes visibles se hace cada vez ás evidente, y cada vez más urgente.
Pero es necesario que nos sigamos cuestionando a qué letras del acrónimo estamos dejando de lado. Nuestros programas de diversidad e inclusión, ¿realmente incluyen a personas bisexuales? ¿Nos estamos asegurando que dentro de espacios diseñados para la comunidad no haya bifobia? ¿Nuestros programas de prevención de acoso y hostigamiento toman en cuenta la vulnerabilidad de las mujeres bisexuales?
Ya es momento de empezar a hacernos estas preguntas y tomar acciones concretas para la inclusión de todas las letras del acrónimo. Y a todxs mis compañeres bisexuales: nuestra identidad es válida. No estamos confundides, no queremos llamar la atención, no es una fase. Existimos y resistimos.
Hagámoslo con orgullo.
Pía Bravo (ella/elle)
Psicóloga, activista bisexual y directora ejecutiva de Presente ONG. Investigadora en diversidad, género e interseccionalidad y especialista en espacios laborales seguros para la comunidad LGBTIQ+.
Debe estar conectado para enviar un comentario.