Terminé de ver Heartstopper (por primera vez) un lunes en la noche. Me tomó bastante más tiempo de lo habitual quedarme dormido, porque por alguna razón que no terminaba de entender, la serie me generaba un montón de ansiedad. No sólo me conmovía, sino que literalmente sentía la ansiedad en el cuerpo. A la mañana siguiente, como a las 7:30 am, a solas, entré a la página de IG de Heartstopper, empecé a ver algunas de las historias y publicaciones, y de repente rompí en llanto. Llanto limpio. Sollozos y mocos.